La base acuosa de una imprimación de epoxi es menos tóxica que las versiones a base de solventes. Reemplaza los solventes por agua, lo que reduce los COVs y las emisiones. Aunque el imprimador es soluble en agua, su capacidad para adherirse a metales, concreto y madera no cambia. Forma un fuerte escudo protector que mejora la adherencia de los recubrimientos posteriores mientras proporciona resistencia a la corrosión y protección de barrera. Debido a su bajo olor y tiempo de secado rápido, las imprimaciones de epoxi acuosas son ideales para hogares y ubicaciones interiores, así como para cualquier lugar que tenga regulaciones ambientales estrictas.