DMP 30, o 2,4,6 - tris(dimetilaminometil)fenol, es bien reconocido como un acelerador de epóxidos. Facilita enormemente la reacción de curado de los epóxidos cis con algunos de los agentes de curado, especialmente los basados en aminas. Un ejemplo de tal región son las áreas frías donde hay bajas temperaturas y plazos ajustados. Dichas regiones se beneficiarían del uso de DMP 30 debido a su eficiencia a bajas temperaturas y plazos ajustados. La productividad se logra en dichas regiones debido a la reducción del tiempo total requerido para el curado gracias a las reacciones catalizadas. Sin embargo, lo crítico que hay que tener en cuenta es que es necesario un control estricto tanto de la dosis como de la temperatura debido a los problemas causados por las bajas temperaturas, como la gelificación prematura o la reducción de la resistencia mecánica del epóxico curado. El DMP 30 ha demostrado ser beneficioso al desempeñarse en muchos procesos y aplicaciones basados en epóxidos.